«En cuanto los árboles dejen de producir oxígeno estamos listos», ha dicho Cospedal
La mayoría de las grandes empresas dedicadas a suministrar clorofila al mundo vegetal también han mostrado su intención de abandonar España si la formación de Pablo Iglesias llegara a ganar las próximas elecciones. Este nuevo inconveniente supondría, según todos los expertos consultados, que la totalidad de las plantas del territorio español dejarían inmediatamente de producir oxígeno, un elemento verdaderamente interesante para la función respiratoria de los ciudadanos.
El anuncio de esta nueva maniobra empresarial se suma a las advertencias que ya han venido publicando esta semana numerosas compañías multinacionales, entre ellas Ford, cuya amenaza de fabricar únicamente automóviles con marcha atrás si ganan los bolivarianos ha indignado no solo a la Guardia Civil de Tráfico sino a un importante colectivo de ciudadanos con problemas cervicales y de orientación espacial.
Pero la posible interrupción de la fotosíntesis en España es, sin embargo, el problema más grave de todos con los que Podemos tendrá que luchar, además de estrellarse contra un sinfín de instituciones oficiales gobernadas por embozados y mafiosos de tres al cuarto, jerarquías militares regidas por los reglamentos de Carlos III, directores generales buscados por la Interpol, banqueros en serie con más de cien mil desahucios a sus espaldas, obispos psicópatas, sacerdotes tóxicos, policías sin educación y periodistas-comisarios.